El Evangelio de Lucas es uno de los cuatro Evangelios que se encuentran en el Nuevo Testamento, y junto con Mateo y Marcos forma parte de los Evangelios Sinópticos. Este Evangelio destaca por su perspectiva universal y su énfasis en la compasión y la preocupación social de Jesús, además de ser conocido como el Evangelio del gozo, del Espíritu Santo y de la oración. En este artículo, exploraremos la importancia del Evangelio de Lucas en la narrativa bíblica y la historia de la redención, así como los beneficios que el lector puede obtener al leerlo.
Datos introductorios de Lucas
Autor y fecha
El autor del Evangelio de Lucas no se identifica por nombre, pero su obra literaria nos dice bastante acerca de él. Es un hombre educado, y su dominio del idioma griego es mejor que cualquier otro escritor del Nuevo Testamento. Entre sus conocidos cuenta a una persona de alta posición social, el «excelentísimo Teófilo», a quien dedica tanto este Evangelio (Lc. 1:3) como su libro Hechos de los Apóstoles (Hch. 1:1). Siendo aparentemente gentil, el autor está interesado en los gentiles, y no tanto en las cuestiones netamente judías. La tradición identifica al autor como Lucas, el compañero del apóstol Pablo. El Evangelio probablemente se escribió muy poco antes del 70 d. C.
Contribución teológica
El Evangelio de Lucas posee la perspectiva más universal de todos, y describe a Jesús como un hombre con compasión por todas las personas. Adicionalmente, Lucas es el Evangelio que más refleja una preocupación social.
- Jesús bendice a los pobres, a los que padecen hambre, a los que lloran y a los desechados (Lc. 6:20-23).
- En sus parábolas se pone del lado del mendigo que se sienta a la puerta del rico (Lc. 16:19-31) y elogia a un recaudador de impuesto que toma distancia del templo y se duele por su pecaminosidad (Lc. 18:9-14).
- Jesús socorre a una madre viuda que ha perdido a su único hijo (Lc. 7:11-17) y a una mujer pecadora (Lc. 7:36-50).
- En otra parábola, el héroe misericordioso es un despreciado samaritano (Lc. 10:25-37); y después de una sanidad, elogia a un samaritano por su gratitud (Lc. 17:11-19).
- Los brazos abiertos del Padre, como en la parábola del hijo pródigo (Lc. 15:11-32), esperan y reciben a todo el que se vuelve a él.
Consideración especial
Para Lucas, la venida de Cristo no es solo una buena noticia; su Evangelio es de hecho un Evangelio de gozo.
- Los nacimientos de Juan y Jesús reciben el eco de canciones de alabanza de María (Lc. 1:46-55), Zacarías (Lc. 1:67-79), los ángeles (Lc. 2:14), y Simeón (Lc. 2:29-32).
- Hasta el aún no nacido Juan salta de alegría en el vientre (Lc. 1:44).
- Y la nota de gozo que suena en el anuncio de Gabriel (Lc. 1:32-33) es repetida finalmente por los apóstoles al final del Evangelio (Lc. 24:52-53).
Además, Lucas es el Evangelio del Espíritu Santo. A diferencia de los otros evangelistas, Lucas enfatiza la actividad del Espíritu Santo en el ministerio de Jesús.
- Juan el Bautista y sus padres están llenos del Espíritu (Lc. 1:15, 41, 67).
- Lo mismo Simeón (Lc. 2:25-35).
- Jesús comienza su ministerio «en el poder del Espíritu» (Lc. 4:14; cf. 4:1, 18; 10:21).
- Y promete el auxilio del Espíritu a sus discípulos en su hora de necesidad (Lc. 12:12).
Finalmente, Lucas es un Evangelio de la oración.
- La multitud ora mientras Zacarías ministra en el altar (Lc. 1:10).
- María ora ante el anuncio de salvación (Lc. 1:46-55).
- Jesús ora en su bautismo (Lc. 3:21), al escoger a sus discípulos (Lc. 6:12), en la confesión de Pedro (Lc. 9:18), y en su transfiguración (Lc. 9:29).
- Jesús da los pasos en su ministerio en la soledad de la oración (Lc. 5:16), cae de rodillas ante el Padre en el Monte de los Olivos (Lc. 22:39-46) y encomienda su espíritu a Dios en la hora de la muerte (Lc. 23:46).
Claves de Lucas
- Palabra clave: Jesús el Hijo del hombre. El Evangelio de Lucas describe a Jesús en su plena humanidad, dando lugar en sus escritos a los sentimientos y la humanidad de Cristo más que los otros Evangelios.
- Versículos claves: Lucas 1:3-4; 19:10
- Capítulo clave: Lucas 15. El punto crucial de este Evangelio es capturado en tres parábolas en el capítulo 15: Que en Cristo Dios ha venido a buscar y a salvar lo que se había perdido.
Síntesis de Lucas
La introducción del Hijo del hombre (Lc. 1:1-4:13)
En los primeros largos capítulos de su Evangelio, Lucas pone gran énfasis en la genealogía, el nacimiento y los primeros años del Hombre perfecto, Jesús, y de su precursor, Juan el Bautista. Las historias de la infancia de ambos se entretejen cuando Lucas narra el anuncio de sus nacimientos, los advenimientos y las presentaciones en el templo. Jesús se prepara por más de 30 años (que se resume en un solo versículo, Lc. 2:52) para un ministerio público de tan solo 3 años. La genealogía invertida del Hijo del hombre se remonta hasta el primer hombre del pacto, Adán, y su ministerio comienza después de ser ungido (bautizado) y puesto a prueba (tentado).
El ministerio del Hijo del hombre (Lc. 4:14-9:50)
El los capítulos de Lucas 4:14 al 6:49 se demuestra la autoridad del Hijo del hombre sobre toda esfera. En esta sección se presenta su autoridad sobre los demonios, las enfermedades y la naturaleza, así como sobre los efectos del pecado, la tradición y todas las personas, como un preludio a su ministerio intenso y variado de predicación, sanidades y discipulado (Lc. 7:1-9:50).
El rechaazo del Hijo del hombre (Lc. 9:51-19:27)
La respuesta doble al ministerio de Jesús, de una fe creciente por un lado y de rechazo progresivo por el otro, ya ha comenzado a presentarse tempranamente en el Evanagelio (cf. Lc. 4:14; 6:11), pero de aquí en adelante la oposición al ministerio del Hijo del hombre se intensifica. La hostilidad de los opositores se dispara especialmente cuando los líderes religiosos lo acusan de estar endemoniado, y Jesús pronuncia contra ellos una serie de ayes (Lc. 11).
Jesús, consciente de que este será su último viaje a Jerusalén, instruye a sus discípulos acerca de una serie de asuntos prácticos, entre los que se cuentan la oración, la codicia, la fidelidad, el arrepentimiento, la humildad, el discipulado, la evangelización, el dinero, el perdón, el servicio, la gratitud, la Segunda Venida y la salvación (Lc. 12:1-19:27).
Crucifixión y resurrección del Hijo del hommbre (Lc. 19:28-24:53)
Tras su entrada triunfal en Jerusalén, Jesús sen encuentra inmediatamente con la oposición de los sacerdotes, los saduceos y los maestros de la ley, y anuncia, entrelazando con su Segunda venida, la destrucción de Jerusalén que tendrá lugar dentro de la misma generación (Lc. 19:28-21:38). El Hijo del hombre instruye a sus discípulos por última vez antes de la traición en Getsemaní. Los juicios a los que fue sometido —tres religiosos y tres civiles— culminan con su crucifixión.
Pero la gloria y fundamento del mensaje cristiano es la resurrección histórica de Jesucristo. El Hijo del hombre, que es Señor y Salvador, vence la tumba tal como lo había prometido, y aparece en diversas ocasiones a sus discípulos antes de ser llevado al cielo.
Importancia y beneficios de leer Lucas
El Evangelio de Lucas ocupa un lugar importante en la narrativa bíblica y la historia de la redención, siendo el Evangelio más universal y socialmente preocupado, ofreciendo así una visión aun más amplia de la persona de Jesús al lado de los demás Evangelios Sinópticos. Dos características sobresalientes en Lucas, de las que hemos visto, son que describe a Jesús como un hombre con compasión por todas las personas, y también que se enfoca en la idea de la venida de Cristo como una noticia que trae gran gozo.
Para concluir, podemos decir que los beneficios de leer este Evangelio son una mayor comprensión de la compasión y la preocupación social de Jesús, una comprensión más profunda del gozo que viene a nuestras vidas al conocer a Cristo, como también una comprensión más clara del papel del Espíritu Santo en la vida de Jesús y sus seguidores, con la oración como una parte imprescindible de la vida cristiana.
