El libro de Esdras es una fascinante obra de la literatura bíblica llena de intrigas políticas, drama humano y una profunda reflexión sobre la fe. A través de su narrativa, aprendemos cómo la perseverancia y el compromiso con los principios de la Palabra de Dios pueden transformar nuestras vidas y el mundo que nos rodea. Para conocer más sobre esta emocionante historia de redención y renacimiento, en esta entrada vamos a ver algunos detalles literarios del libro de Esdras, así como su trasfondo, su mensaje y su conexión con otros Libros Históricos del Antiguo Testamento.
Datos introductorios del libro de Esdras
Autor y fecha
En el Antiguo Testamento hebreo, Esdras y Nehemías aparecen como un solo libro, estrechamente relacionados en tema y estilo con los libros 1 y 2 Crónicas. Los últimos dos versículo de 2 Crónicas se repiten en los primeros tres versículos del libro de Esdras, indicando, probablemente, que deben ir juntos.
- «En el primer año del reinado de Ciro, rey de Persia, el Señor dispuso el corazón del rey para que este promulgara un decreto en todo su reino y así se cumpliera la palabra del Señor por medio del profeta Jeremías. Tanto oralmente como por escrito, el rey decretó lo siguiente: “Esto es lo que ordena Ciro, rey de Persia: El Señor, Dios del cielo, que me ha dado todos los reinos de la tierra, me ha encargado que le construya un templo en la ciudad de Jerusalén, que está en Judá. Por tanto, cualquiera que pertenezca a Judá, que se vaya, y que el Señor su Dios lo acompañe”» (2 Cr. 36:22-23).
- «En el primer año del reinado de Ciro, rey de Persia, el Señor dispuso el corazón del rey para que este promulgara un decreto en todo su reino y así se cumpliera la palabra del Señor por medio del profeta Jeremías. Tanto oralmente como por escrito, el rey decretó lo siguiente: “Esto es lo que ordena Ciro, rey de Persia: El Señor, Dios del cielo, que me ha dado todos los reinos de la tierra, me ha encargado que le construya un templo en la ciudad de Jerusalén, que está en Judá. Por tanto, cualquiera que pertenezca a Judá, vaya a Jerusalén a construir el templo del Señor, Dios de Israel, el Dios que habita en Jerusalén; y que Dios lo acompañe”» (Esd. 1:1-3).
Por esta razón —aunque el indicio por sí solo no es concluyente— muchos eruditos creen que Esdras fue el autor o, por lo menos, el editor compilador de estos cuatro libros en algún punto del quinto siglo a. C.
Contexto histórico
El libro de Esdras corresponde al período postexílico. Son los años en que un remanente de la nación regresa a Jerusalén después de unos setenta años de cautividad en Babilonia. El retorno se produjo poco después que los persas derrotaron a los babilonios. A diferencia de los babilonios, los persas permitieron que los pueblos subyugados vivieran en sus propias regiones de origen, bajo la autoridad de un gobernador, y practicaron la tolerancia religiosa.
Contribución teológica
El tema del libro de Esdras es la restauración del remanente del pueblo del pacto en Jerusalén en obediencia a la ley de Dios. En su providencia, Dios llega a usar a los reyes persas inconversos para cumplir su voluntad soberana y hacer regresar a su pueblo a su propia tierra.
Consideración especial
El trato de Esdras hacia las mujeres extranjeras (Esd. 10:10-19), con quienes se habían casado los varones judíos, suele plantear un problema para algunos lectores de la Biblia. ¿Cómo pudo Esdras ser tan cruel para ordenar que estas mujeres fueran despedidas (divorciadas) sin medios de sustento?
Las acciones de Esdras se deben comprender a la luz de la drástica situación que enfrentaba la comunidad judía en Jerusalén después del exilio. Solo un pequeño remanente del pueblo del pacto había regresado, y para ellos era sumamente importante que se mantuvieran libres de la influencia de la idolatría pagana y de la cultura extranjera. Esdras debe haber comprendido, además, que este era uno de los problemas que en primer lugar los había llevado a la caída y a la cautividad.
Claves del libro de Esdras
- Palabra clave: Templo. El tema fundamental de Esdras es la reconstrucción del templo y la restauración espiritual, moral y social del remanente que regresó a Jerusalén bajo el liderazgo de Zorobabel y Esdras.
- Versículos clave: Esdras 1:3; 7:10
- Capítulo clave: Esdras 6. El capítulo 6 de Esdras narra la terminación y dedicación del templo, lo que estimula la obediencia del remanente para observar la Pascua y apartarse.
Síntesis de Esdras
La restauración del templo (caps. 1-6)
Ciro, el rey de Persia, proclama un decreto que permite al pueblo judío regresar a Jerusalén para reedificar el templo y para restablecerse en su tierra. Unas cincuenta mil personas del pueblo (cf. Esd. 2:64-65) regresaron bajo el liderazgo de Zorobabel (también llamado Sesbasar), «príncipe de Judá» (Esd. 1:8 NBLA) descendiente directo del rey David (cf. 1 Cr. 3:1, 19), nombrado por Ciro como gobernador de Judá (Esd. 5:14; cf. Hag. 1:1). «Sesbasar» podría ser una versión babilónica del nombre «Zorobabel», ya que durante el exilio, muchos judíos adoptaron nombres babilónicos o persas en lugar de sus nombres hebreos originales. Los que regresaron eran de las tribus de Judá, Benjamín y Leví; pero es evidente que también regresaron representantes de las demás tribus.
Zorobabel primero restaura el altar y las fiestas religiosas antes de comenzar con el trabajo del templo mismo. Se pone el fundamento del templo, pero hay oposición y cesa el trabajo. Los profetas Hageo y Zacarías exhortan al pueblo para que vuelvan a edificar el templo (Esd. 5:1-2), y la obra se reinicia dirigida por Zorobabel y el sumo sacerdote Josué. Tatenay, el gobernador persa, protesta ante el rey Darío I sobre la reconstrucción del templo y se opone a la autoridad de ellos para continuar. Darío encuentra el decreto de Ciro y lo confirma, incluso obligando a Tatenay que completara lo necesario para acabar la obra.
La reforma del pueblo (caps. 7-10)
Por la autoridad del rey Artajerjes, y bajo Esdras, se produjo un retorno en menor escala unos ochenta años después del primer retorno dirigido por Zorobabel. Regresaron menos de dos mil hombres, pero Dios usa a Esdras para reedificar espiritual y moralmente al pueblo. Cuando Esdras descubre que el pueblo y los sacerdotes se han casado con mujeres extranjeras, se identifica con el pecado de su pueblo y ofrece una gran oración intercesora en su favor. Durante el lapso de 58 años entre Esdras 6 y 7, el pueblo había caído en un estado de confusión espiritual y Esdras se alarma. Responden rápidamente a la confesión y al lamento de Esdras, y asumen el compromiso de dejar a sus mujeres extranjeras para vivir conforme a la ley de Dios. Esta confesión y respuesta a la Palabra de Dios produce un gran avivamiento.
El libro de Esdras en la historia bíblica
El libro de Esdras es importante en la historia bíblica y de la redención por varias razones:
- La restauración de Jerusalén: El libro de Esdras describe la restauración de Jerusalén después del exilio babilónico. Esdras y Nehemías trabajaron para reconstruir las murallas de la ciudad y el templo, lo que permitió que el culto y la adoración se reanudaran en Jerusalén. Esta restauración fue importante para el pueblo judío porque les permitió mantener su identidad religiosa y cultural.
- La centralidad de la Ley: Esdras era un sacerdote y escriba judío que se centró en enseñar la Ley de Moisés al pueblo de Judá. Él convocó una gran asamblea en Jerusalén para leer y explicar la ley, lo que ayudó a restaurar la observancia de la ley entre el pueblo judío. La restauración de la ley fue esencial para la identidad y la vida religiosa de los judíos.
- La perseverancia de la fe: El libro de Esdras también enseña la importancia de mantener la fe en Dios incluso en tiempos difíciles. Los judíos que regresaron de Babilonia enfrentaron muchos desafíos, pero Esdras les enseñó que confiar en Dios era la clave para superar estos desafíos.
- La preparación para la venida del Mesías: El libro de Esdras también es importante en la historia de la redención porque preparó el camino para la venida del Mesías. La restauración de Jerusalén y la enseñanza de la ley sentaron las bases para la llegada de Jesucristo, quien cumplió las profecías mesiánicas del Antiguo Testamento.
Ahondando un poco más en el último punto, aunque el libro de Esdras no contiene muchas tipologías explícitas de Cristo, sí hay algunas similitudes y paralelismos muy interesantes que se pueden encontrar. Los roles históricos del gobernador (príncipe) Zorobabel y del sacerdote Esdras podrían apuntar al ministerio real y sacerdotal de Jesús.
- Por ejemplo, Esdras era un sacerdote y escriba que se enfocó en enseñar la ley de Moisés al pueblo judío. En este sentido, se podría decir que Esdras prefiguró el ministerio de Jesucristo como sacerdote maestro, quien enseñó la Palabra de Dios al pueblo.
- Además, la restauración de la adoración en el templo de Jerusalén, que fue liderada por Esdras, prefiguró la obra de Jesucristo como el verdadero templo de Dios y como aquel que restauraría la adoración verdadera. Jesús mismo dijo: «Destruyan este templo, y lo levantaré de nuevo en tres días» (Jn 2:19).
- También se podría argumentar que la restauración de Jerusalén por Esdras (junto con Nehemías) prefiguró la obra de Jesucristo en la redención del pueblo y la restauración de nuestro vínculo de pacto con Dios. Así como Jerusalén fue restaurada y el templo reconstruido, Jesucristo restauró nuestra relación con Dios y nos dio acceso a su presencia a través de su muerte y resurrección.
- Aunque no hay tipologías explícitas de Cristo en relación con Zorobabel, no es difícil ver en él una figura que prefigura a Jesucristo como el rey mesiánico. Esto se debe a que Zorobabel fue un líder elegido por Dios para liderar a su pueblo de regreso del cautiverio a la tierra prometida, así como el Mesías sería un rey que lideraría a su pueblo a la victoria y la libertad eternas.
- Además, en el libro de Esdras, Zorobabel es descrito como un descendiente de la familia real de Judá, lo que lo relaciona con la línea de David, de la cual se espera que el Mesías sea descendiente. En este sentido, podemos ver a Zorobabel como una figura que anticipa la venida del Mesías.
Como podemos ver, el libro de Esdras es importante para nosotros hoy por varias razones:
- En primer lugar, ofrece un registro histórico importante de la restauración de Jerusalén después del exilio babilónico, incluyendo la reconstrucción del templo y la restauración de la adoración verdadera. Esto proporciona un contexto valioso para entender las Escrituras del Antiguo Testamento y el Nuevo Testamento.
- En segundo lugar, el libro de Esdras destaca la importancia de obedecer la ley de Dios y vivir de acuerdo con sus mandamientos. Esto es relevante para los cristianos de hoy, ya que la obediencia a la Palabra de Dios sigue siendo fundamental en nuestra relación con Él y en nuestro testimonio en el mundo.
- Además, el libro de Esdras muestra cómo Dios cumple sus promesas y es fiel a su pueblo, incluso en tiempos difíciles y en medio de las consecuencias del pecado. Esto nos ofrece consuelo y esperanza a los cristianos hoy, ya que podemos confiar en que Dios siempre cumple sus promesas y está trabajando para nuestro bien y para su gloria.
En resumen, el libro de Esdras es importante porque ofrece un registro histórico valioso del pueblo del pacto, destaca la importancia de la obediencia a la Palabra de Dios y muestra la fidelidad de Dios en tiempos difíciles, a la vez que nos señala a la grandiosa redención de Jesús. Si nunca lo has hecho, ¿te animas a leer el libro de Esdras completo, los diez capítulos, de una sentada?
